Brochetas marineras

Hoy os traemos la receta más sencilla de todo nuestro blog. Si estás pensando en celebrar una cena en casa, no lo dudes, está es la receta perfecta.

Para este sencillo plato necesitarás:

• 500 gramos de Gamba Blanca de Huelva cocido tamaño L
• 1 Rejo de pulpo cocido.
• 500 gramos de gamba roja tamaño M
• 500 gramos de huevos de choco
• Pimentón picante
• Aceite de olvida virgen extra
• Palos de madera para pinchitos

Tiempo de preparación: 15 minutos.

Tiempo de cocinado: 10 minutos

Número de comensales: 6 personas.

Con estos ingredientes cocinaremos dos variedades de brochetas, de gamba blanca y pulpo, y de gamba roja y huevos de choco.

En primer lugar, comenzamos pelando las gambas blancas y desechando las cáscaras y cabezas.

Cortamos el rejo de pulpo en finas lonchas, teniendo en cuenta que podamos clavar el pincho de madera.

Uno a uno, vamos montando nuestros pinchitos, con una gamba y un trozo de rejo de pulpo.

Una vez montado, preparamos en un cuenco aceite de oliva y un poco de pimentón picante. La cantidad de pimentón será al gusto de cada uno. Con la ayuda de un pincel de cocina, vamos pintando cada pinchito con la mezcla de aceite y pimentón, por las dos caras.

Para que el proceso del cocinado sea más rápido, os recomendamos utilizar una plancha de cocina. La calentamos al máximo y colocamos los pinchos para darle un simple toque de calor. Es rápido, vuelta y vuelta.

Continuamos con las brochetas de gamba roja y huevos de choco.

Pelamos las gambas rojas y reservamos las cáscaras y cabezas. Podemos usarlas para hacer un caldo de marisco que nos servirá en infinidades de recetas.

Cortamos los huevos de choco en trozos pequeños, y comenzamos con el montaje de las brochetas. Al igual que con las anteriores, vamos colocando una gamba roja y un trozo de huevo de choco.

Vertemos un poco de aceite de oliva sobre la plancha y calentamos. Una vez haya alcanzado el calor suficiente, colocamos los pinchitos y vamos dando la vuelta según se vayan dorando. Ponemos un poco de sal gorda por encima.

Ya tendríamos todo listo para emplatar y servir.

Es un plato perfecto para una cena con familiares o amigos. ¡Sencillo, rápido y delicioso!